Artículo de Iván Aguiar para La Opinión Coruña
Arteixo tiene veinte molinos en apenas tres kilómetros en el entorno del rego da Ibia. Un vecino de Larín los localizó por "casualidad" y ha elaborado una propuesta para crear una senda y con la que también se rehabilitarían las estructuras. Estos molinos quedaron sin uso hace unas cuatro décadas y han quedado en el olvido desde entonces, según destaca este vecino. Este residente de Larín señala que un día cuando realizaba una ruta por la zona se encontró con otro caminante que le comentó que había muchos molinos en el entorno y se puso a investigar sobre el tema.
La parroquia de Larín tiene veinte molinos totalmente abandonados en un espacio de apenas tres kilómetros. Un vecino de esta parroquia que prefiere mantenerse en el anonimato los ha localizado y ha presentado al Concello de Arteixo una propuesta para crear una senda que iría desde la Hípica de Casas Novas y que llegaría hasta la playa de Barrañán. Este residente explica que descubrió esta cantidad de molinos de "casualidad" al realizar una ruta por un lugar cercano, ya que en la zona existe una senda señalizada por el Ayuntamiento. "Haciendo yo esa ruta actual me encuentro con otro paseante que me comenta que hay bastantes molinos en todo el recorrido", señala el vecino.
Los veinte molinos se encuentran situados en apenas tres kilómetros junto al rego da Ibia, en las proximidades de la Hípica de Casas Novas. Este vecino de Larín señala que una vez le comentan la existencia de estos molinos en la zona empezó a investigar. "Veo que en el Ayuntamiento hay documentación que ubica alguno de los molinos", indica. También destaca que recibió "una gran colaboración" de una empleada del Concello, María Rozamontes.
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¿Cómo es posible que estos molinos hayan pasado desapercibidos hasta ahora? El autor de la propuesta de la senda destaca que los molinos dejaron de usarse "fácilmente hace 40 años" y que con el paso de los años se fueron cubriendo de maleza y matorral. "Con toda esa invasión de naturaleza es fácil que los molinos pasen desapercibidos", asegura el vecino. El residente además explica que la existencia de estas estructuras cae totalmente en el olvido en cuanto muere la gente mayor, que es la que "más información" tiene sobre los molinos.
El Concello de Arteixo ya tiene en su poder la proposición de este vecino, que implicaría restaurar los molinos, y estudia cómo ejecutarla. El concejal de Urbanismo, Alberto Castro, indica que el coste sería de ocho millones de euros y que hay que ir "poco a poco". La intención del Concello es ejecutar la obra por "tramos" y uno de los primeros será en Larín. El edil también asegura que el Ayuntamiento busca financiación para elaborar el proyecto y construir la senda. La senda sería similar a la que existe en el paseo fluvial de Loureda a Arteixo.
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