La histórica Fábrica de Colas resurge en el Camino de las Aguas.
Artículo de Tribuna Salamanca
Un proyecto privado rehabilitará la Fábrica de Colas, una construcción industrial del siglo XIX casi única en Salamanca, para convertirlo en centro de emprendimiento y cultura. Salvará su particular chimenea y devolverá esplendor a un edificio que es parte de la historia de la ciudad.
El edificio de la antigua Fábrica de Colas reúne muchos pedazos de la historia de Salamanca. En pleno Camino de las Aguas, es uno de los escasos edificios industriales que quedan de finales del siglo XIX, tiene una de las pocas chimeneas de ladrillo que hay en pie en la ciudad, dio origen al actual sistema de impulsión de agua y tuvo entre sus propietarios al que fuera presidente de la República en el exilio. A pesar de ello, sus últimos años han sido sombríos. Afortunadamente, esto va a cambiar gracias a un excelente proyecto privado para recuperar su uso.
Los orígenes del edificio se remontan al año 1874, cuando por el entonces arquitecto municipal José Secall, proyectó el edificio con objeto de que fuera la estación de elevación de agua desde el río hasta el depósito de San Mamés (actual museo del comercio), siendo el origen de actual del sistema de abastecimiento de agua de la ciudad de Salamanca, además de dar nombre a la citada avenida.
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Ya entrado el siglo XX, el edificio sufrió una ampliación obra del arquitecto Santiago Madrigal y fue destinado a fábrica de productos químicos y farmacéuticos propiedad, entre otros, del que fuera presidente de la segunda república José Giral. Giral fue catedrático de Química en la Universidad de Salamanca entre 1905 y 1920, cuando se marchó la ciudad y vendió sus negocios, entre otros, una farmacia.
El edificio ha estado sin uso durante los últimos 30 años y no ha recibido cuidados a pesar de que cuenta con protección integral, está catalogado en el PGOU de Salamanca y es una de las escasas muestras de la arquitectura industrial del final del siglo XIX y principios del XX, en la ciudad, conservando su imponente chimenea de ladrillo de tejar, siendo uno de los símbolos del barrio de Prosperidad y del propio Camino de las Aguas.
El pasado mes de julio, una joven empresa de ingeniería, Calabrés Tomé, llegó a un acuerdo con los actuales propietarios del edificio para poner en marcha un ambicioso proyecto. Según explica Sergio Calabrés, CEO de la firma, el objetivo es rehabilitar y consolidar el inmueble, conservando su estética original y restaurar su chimenea usando métodos tradicionales. Ya cuenta con licencias para ello. Con la colaboración del estudio de interiorismo y diseño GIVEME5, es la de crear un espacio de trabajo en un lugar con tanta historia y simbólico como es dicho inmueble, afrontando su crecimiento futuro desde este bien patrimonial.
Para la realización del proyecto se han hecho uso de las últimas técnicas de captura masiva de datos para tener una auscultación precisa y absoluta de todo el inmueble y en especial de la chimenea. En el exterior se realizará un jardín permeable, el cual otorgará otra perspectiva a la entrada del Camino de las Aguas, dando dinamismo al barrio y a la zona en uno de los edificios más singulares del barrio.
El objeto del edificio es crear un espacio de trabajo, dedicado a potenciar el emprendimiento, el patrimonio y la cultura en la ciudad de Salamanca; es un proyecto similar a los que ya se desarrollan en Barcelona, Madrid, Valencia y otras ciudades del resto de Europa. Dándole una nueva vida a un edificio industrial, reutilizando y adaptando los espacios a los tiempos que corren y hacerlo visible al resto de la ciudad dinamizando la vida del entorno.
Fuente de la noticia https://www.tribunasalamanca.com
Un proyecto privado convertirá la antigua Fábrica de Colas del Camino de las Aguas en un espacio de emprendimiento.
La intención de la empresa es la de crear "un espacio de trabajo en un lugar con tanta historia y simbólico como es dicho inmueble, afrontando su crecimiento futuro desde este bien patrimonial". "La idea enmarcada dentro de nuestras políticas es poner en valor el edificio, rehabilitándolo y, sobre todo, actuando de manera urgente sobre la chimenea que sufre severos daños.
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El objeto del edificio es crear un espacio de trabajo, dedicado a potenciar el emprendimiento, el patrimonio y la cultura en la ciudad de Salamanca; es un proyecto similar a los que ya se desarrollan en Barcelona, Madrid, Valencia y otras ciudades del resto de Europa. Dándole una nueva vida a un edificio industrial, reutilizando y adaptando los espacios a los tiempos que corren y hacerlo visible al resto de la ciudad dinamizando la vida del entorno", explican en un comunicado
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La segunda vida de la Fábrica de Agua de Salamanca
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