Reanudadas las conversaciones en torno a la antigua fábrica de vidrios con dos reuniones.
La plataforma ciudadana constituida en torno a la antigua fábrica de vidrios 'La Trinidad', enclavada en la avenida de Miraflores, en Sevilla, y cuya nave central, hornos y chimenea están protegidos como bien de interés cultural (BIC), ha visto cumplidas sus demandas ante las administraciones en cuanto a la reanudación de las conversaciones destinadas a resolver el futuro de este emblemático espacio. Después de que la pasada noche de Año Nuevo la Policía Local disolviese una fiesta ilegal que se celebraba en el recinto, el Ayuntamiento hispalense ha recibido ya a la plataforma y este lunes lo hará la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía.
Después de que la Policía Local disolviese la madrugada de Año Nuevo una fiesta que se celebraba en el interior de la fábrica al ser detectadas diversas incidencias en materia de prevención y seguridad, Basilio Moreno y Julián Sobrino, en nombre de la plataforma, han manifestado a Europa Press que el pasado 16 de enero fueron recibidos por la concejal de Cultura del Ayuntamiento hispalense, María del Mar Sánchez Estrella, y por un representante de la Gerencia de Urbanismo. El próximo lunes, en la misma línea, se celebrará una reunión con Fernando Herrera, director de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía.
Todo ello, como señala Julián Sobrino, "para intentar desentrañar la increíble madeja de agentes" que juegan diferentes papeles en el presente y futuro de este emblemático conjunto fabril de la avenida de Miraflores castigado por los expolios, ocupaciones cíclicas y su propio y claro deterioro arquitectónico. El propio alcalde, Juan Ignacio Zoido, ha reconocido que la recuperación de este espacio constituye otra más de las asignaturas pendientes de la ciudad, pero ha advertido de que el Ayuntamiento hispalense necesitará el respaldo de la "iniciativa privada" para resolver el asunto, que cuenta con no pocos años a sus espaldas.
EL DESTINO DE LA FÁBRICA DE VIDRIOS
Porque el 4 de septiembre de 2001 cuando la Consejería de Cultura acordó inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz este antiguo y simbólico conjunto fabril de la avenida de Miraflores que pertenece a la sociedad 'Edificarte Promoción Inmobiliaria', declarada hace años en concurso de acreedores en el marco de la catástrofe sufrida por el sector inmobiliario y de la construcción.
El recinto es uno de los escasos ejemplos que ha pervivido de la arquitectura de la gran industria y de la primera expansión industrial de Sevilla fuera de su recinto amurallado. La declaración de bien de interés cultural incoada y aprobada en aquellos tiempos, en concreto, protege la nave central, los hornos y la chimenea de la planta como lugar de interés etnológico, aunque la Administración autonómica promueve desde hace años un procedimiento para catalogar, además, las naves dos y tres en una única tipología: la de "lugar de interés industrial". La idea, según la negociación promovida años atrás, era ceder al patrimonio público los espacios protegidos a cuenta de sus restricciones en materia urbanística.
A lo largo de los últimos años, de cualquier forma, la quiebra de 'Edificarte Promoción Inmobiliaria' ha agudizado el abandono y ruina del conjunto fabril, que ha sido objeto de diversas ocupaciones ilegales y episodios de expolio, siendo incluso destruidos unos hornos de temple y recocido, así como unas calderas, unas instalaciones aéreas de transporte de vidrio y un horno de fusión, en una actuación que fue incluso elevada a la Justicia.
Reanudadas las conversaciones en torno a la antigua fábrica de vidrios con dos reuniones.
Imagen de la noticia |
Zoido logra financiación europea por cien millones para revitalizar edificios.
Se transcribe parte de la noticia donde se habla sobre La Trinidad.
...
El Ayuntamiento lleva dos años ofreciendo un catálogo de espacios industriales de la ciudad a inversores privados para instaurar nuevos negocios y promover la recuperación de ejemplos de un patrimonio orillado y poco reconocido a pesar del valor histórico que atesora en muchos casos. Los requisitos generales son que los proyectos sirvan para crear empleo y que salvaguarden las características arquitectónicas de los edificios. El catálogo distingue entre espacios industriales históricos activados, desactivados y que mantienen el mismo uso. Los desactivados son definidos como aquellos lugares que no han sido objeto de ninguna intervención, donde ha cesado la actividad productiva original, pero que mantienen en todo o en parte las estructuras construidas anteriores. Algunos de estos espacios siguen hoy en uso, aunque "en unas condiciones de gran precariedad al no existir un proyecto integral de rehabilitación", según se detalla en los informes previos al catálogo. Los espacios desactivados que el Ayuntamiento quiere que la iniciativa privada ayude a su revitalización son los siguientes: Corral de Artesanos (Castellar, 52), fábrica de sombreros de Fernández Roche (en la calle Heliotropo), Fábrica de Tabacos de Los Remedios, talleres de Renfe en San Jerónimo, fábrica de vidrio de la Trinidad (en la avenida de Miraflores), garaje de Miraflores, Fábrica de la Cruzcampo, Fábrica de Artillería de San Bernardo (cuya apertura y reactivación es uno de los grandes objetivos de Zoido) y la antigua estación de filtraje de La Algaba.
...