Patrimonio ferroviario en riesgo de desaparecer.
Artículo de N. Simón para Información
El futuro proyecto de la Vía Verde entre Muro y Villalonga sobre el antiguo ferrocarril entre Alcoy y Gandia pone en jaque el patrimonio que surge a lo largo de este tramo. Una amenaza por la que la Asociación Tren Alcoi-Gandia lucha a diario y ahora trabaja junto a los Ayuntamientos de l'Orxa, Muro y Agres con el objetivo de que las administraciones municipales declaren estos elementos Bienes de Relevancia Local (BRL) y no puedan ser derribados cuando el proyecto se materialice.
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Un paso que tendrá que completarse con la rehabilitación de algunos de ellos para evitar su completa degradación que en muchos casos está muy avanzada.
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La asociación Alcoi-Gandia exige que no se destruya el patrimonio del ferrocarril.
Artículo de S. Sapena para Levante emv
La empresa Barbo Energías Renovables SA, con sede en San Sebastián, ha descartado poner nuevamente en marcha las antiguas centrales que generaban electricidad aprovechando saltos de agua tomada del río Serpis. Esta mercantil se ha quedado con esos edificios, que fueron propiedad de Hidroeléctrica y de su heredera, Iberdrola, que dejaron de funcionar hace muchos años. La pésima situación en la que se encuentran las popularmente conocidas como «fàbriques de la llum» obligaría a una considerable inversión económica para reponer la maquinaria y la infraestructura que se necesita para poner nuevamente en movimiento las turbinas. Entre otros muchos aspectos, se tendrían que reconstruir edificios, tomas de agua y canales de conducción del caudal. Eso, teniendo en cuenta que se trata de centrales de escasa potencia generadora llevan a descartar su explotación comercial. El alcalde de Villalonga, Domingo García, habló hace unas semanas con responsables de Barbo, a quienes les trasladó su preocupación por el abandono de elementos que constituyen un valioso patrimonio de la era industrial. Uno de los dirigentes de la empresa señaló a este periódico que trasladó a la primera autoridad local su total disposición a ceder el uso de los edificios, entre ellos los mejor conservados, que son los de l'Infern y la Reprimala. Aunque se trata de algo que no se plantea a corto plazo, el alcalde de Villalonga sí apuntó la posibilidad de habilitar una especie de museo sobre la producción eléctrica, la vía verde y el tren Gandia-Alcoi en la antigua central de la Reprimala, aprovechando su proximidad al pueblo y por ser el punto de origen de la vía.
El pliego de condiciones redactado por la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad de la Generalitat Valenciana para redactar el proyecto de la vía verde del Serpis en el tramo comprendido entre Muro d'Alcoi y Villalonga permite que, si así se considera, se derriben algunos elementos que constituyeron la infraestructura básica del tren que desde finales del siglo XIX hasta 1969 circuló entre la ciudad de Alcoi y el puerto de Gandia. Esa circunstancia ha llamado la atención de la Associació Tren Alcoi Gandia, cuyo presidente, Jaume Gómez, ya se ha dirigido a varias instituciones con el objetivo de que se mantenga todo el patrimonio industrial que permitió el funcionamiento de aquella infraestructura. De hecho, el pliego de la Generalitat cita expresamente que se permitiría el derribo incluso de la antigua estación de l'Orxa, a la que define como «pequeña construcción abandonada», lo que ha generado preocupación entre la entidad que desde hace años defiende lo que considera que es un patrimonio histórico de todos que es necesario preservar. Inmediatamente tener conocimiento de este hecho, el presidente de la asociación se ha dirigido a varios ayuntamientos, entre ellos los de Villalonga, l'Orxa y Muro d'Alcoi, instando a que no solo defiendan ante la Generalitat la conservación de todos los elementos del antiguo ferrocarril, sino a dar un paso más y catalogarlos como Bien de Relevancia Local, lo que impediría su derribo o su mutilación. Según señaló Jaume Gómez a este periódico, en el caso de Villalonga, se entrevistó con el concejal Vicent Ferrer, quien le transmitió su sintonía para iniciar acciones tendentes a preservar ese patrimonio. La antigua línea ferroviaria perdió gran parte de sus elementos poco después de 1969 porque entonces el Estado autorizó al desmantelamiento de las infraestructuras. El valor del hierro llevó incluso a que se retiraran los raíles y los puentes metálicos que salvaban, en varios puntos, el cauce del río Serpis. Pero sí que permanecieron otros vestigios, como los pilares, algunas estaciones, muros de protección, un puente de piedra y los grandes pilares sobre los que se sostenían los puentes, que aún se conservan. En Villalonga la construcción del instituto Vall de la Safor supuso la demolición de la antigua estación, pero posteriormente se reconoció el error cometido y el mismo ayuntamento construyó una réplica del edificio que hoy se encuentra junto al polideportivo municipal, a muy poca distancia de donde estuvo la original. Según señaló el pasado julio la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, el proyecto para la adecuación de esa esperada y reivindicada vía verde del Serpis estará a principios del año próximo, y es entonces cuando se tendrá que buscar la financiación para licitar las obras. Con la reposición de los tableros de los cuatro puentes que fueron desmontados, unido al que ya se colocó entre Alcoi y Cocentaina, será posible circular en bicicleta por una vía en condiciones desde Villalonga hasta la capital de l'Alcoià. Faltará entonces el tramo de Villalonga, Potries, Beniflà, Beniarjó, Almoines y Gandia para completar el trazado hasta el puerto, que es el objetivo último de este proyecto.
Fuente de la noticia https://www.levante-emv.com