Los 200 metros visitables de la Mina Esperanza desde marzo del año pasado, tendrán un atractivo más:el museo de los minerales de la Sierra de Atapuerca, que se convertirá en uno de los primeros subterráneos del país. Se instalará en la galería conocida como La Caverna, una de las más amplias del complejo minero de Olmos, ya que tiene una superficie en torno a los 30 metros cuadrados.
El proyecto ha sido encargado a la empresa MAD Medioambiente y Desarrollo Ambiental, ubicada en Agés, de la que es gerente Ramón Luque Cortina, que ya trabaja en el diseño y contenidos del museo. Para financiar este proyecto que tiene un objetivo divulgativo, se acudirá a la convocatoria de ayudas que acaba de sacar la Diputación, a través de Sodebur, destinadas a la promoción económica y social de entidades menores de 20.000 habitantes, a desarrollar por las mancomunidades en su ámbito territorial y competencial, como son calidad de vida, capital humano, imagen y turismo e infraestructuras.
La Caverna es el sala principal del entramado subterráneo de la mina, por sus dimensiones y porque de ese espacio parten hasta 8 galerías que van tomando caminos diferentes por el subsuelo de esta antigua mina de hierro.
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Mientras Ramón Luque diseña el montaje de la exposición de minerales y estudia su contenido, distribución e, incluso, iluminación y sonido, el alcalde pedáneo de Olmos de Atapuerca, Eduardo Cerdá, explica que previamente se tendrán que realizar en la sala obras de acondicionamiento, comenzado por excavar en el subsuelo para sacar al exterior los raíles que conformarán el suelo de la galería. Se calcula que será necesario sacar hasta 120 metros cúbicos de sedimentos. Cerdá considera que el Museo de los Minerales, «dentro del gran museo que ya de por sí es la propia Mina», puntualiza, será único y podrán en valor otro aspecto de la Sierra de Atapuerca, mundialmente conocida por los fósiles, pero que conserva un rico patrimonio geológico.
Con este espacio museístico, se mostrará a los visitantes los aspectos geológicos del entorno paisajístico así como de la propia mina mina, es decir, el por qué de la formación de los minerales dentro de la tierra y para que se utilizan, además de destacar la importancia y el valor del patrimonio industrial. Ese carácter divulgativo a la par que científico tendrá su principal foco de atención en los escolares, que podrán hacer experimentos dentro de la mina.
El museo de los minerales será, sin duda, un aliciente más para visitar la Mina Esperanza. Otro proyecto en la mente del regidor de esta pedanía del municipio de Atapuerca, es el centro de recepción, que se ubicaría en una de las casetas exteriores. Este proyecto, sin embargo, tendrá que esperar porque actualmente no hay dinero para acometerlo y tampoco las administraciones públicas tienen líneas de financiación para este tipo de iniciativas.
Durante este año de apertura de la Mina Esperanza, han sido 3.000 los visitantes que se han adentrado en las profundidades de estas antiguas galerías. Sin ser una cifra a menospreciar, el alcalde de Olmos considera que se han quedado por debajo de las expectativas; buena parte de la ‘culpa’ está en que aún no se ha hecho realidad integrar las visitas en el Espacio Atapuerca, aunque sí hay descuentos para ‘conectar’ con la visita a Puras de Villafranca.