En otras noticias ya os avisé que seestaba demoliendo esta histórica fábrica de Valencia, y lamentó que el final que se le va a dar es conseguir un solar para hacer un parking....
Con los muchos usos que se podrían haber dado a sus instalaciones y se decide su derribo para hacer un parking, así poco a poco vamos perdiendo nuestra historia industrial.
Me llamó la periodista Isabel Domingo de Las Provincias para preguntarme qué opinaba sobre el derribo y el futuro uso de su solar, como presidenta de APIVA.
A continuación os pongo el artículo que ayer se publicó en Las Provincias.
Autora: Isabel Domingo
La antigua fábrica de cervezas Turia, ubicada en la calle San Vicente, cerca del monumento de la Cruz Cubierta, se convertirá en las próximas semanas en un parking destinado a los clientes de una discoteca situada en el número 305 de la misma calle.
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Así se puede observar en dos carteles que hay situados en la entrada del complejo fabril en los que puede leerse «Disculpad las molestias. Estamos adecuando el parking para vuestra comodidad». También lo confirmaron fuentes de la discoteca, llamada ahora Veracruz Valencia (antiguamente había allí unos cines con el mismo nombre) y reconvertida en club de música electrónica. «Tenemos la licencia para parking desde hace dos meses pero estamos esperando a que finalicen los derribos», explicaron.
Y es que la cervecera, ubicada sobre una superficie de 30.000 metros cuadrados, está en situación de «demolición controlada» por parte de la contrata municipal de derribos al encontrarse en «ruina inminente». Así lo estipuló el ayuntamiento a finales de junio, cuando dio la orden a la contrata municipal debido a la falta de respuesta del propietario (la inmobiliaria Layetana) a los requerimientos del consistorio para su mantenimiento.
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El complejo, cuyas instalaciones datan de 1947, ha sido víctima de saqueos, entradas ilegales, acumulación de basuras e incendios (el último en mayo) desde que a mediados de los 90 otra empresa cervecera adquiriera la fábrica, la cerrara y desmantelara posteriormente. Una situación que la llevó a un estado ruinoso que no permite garantizar la seguridad del inmueble, excluido del plan urbanístico del Parque Central, salvo la chimenea (el único elemento que quedará en pie).
La transformación de la vieja fábrica en un aparcamiento para los clientes de la discoteca ha causado malestar entre los vecinos de la zona por varios motivos. Así la asociación de vecinos San Vicente Mártir-Bulevar sur (recién constituida) criticó que el coste, en un primer momento, salga de las arcas municipales. El derribo está presupuestado en unos 400.000 euros que el consistorio, como hace en estos casos o en los de limpieza de solares, traslada luego a los propietarios.
Pancartas en balcones
La entidad mostró su temor a que la nueva explanada se convierta en un punto de atracción para que más jóvenes realicen botellón, una práctica que sufren desde hace un par de años y que les llevó a colgar pancartas en sus balcones y a realizar concentraciones en la calle (dos acciones que no descartan repetir).
El presidente vecinal, Elías Sánchez, lamentó que «a pesar de las llamadas que hacemos a la policía, no se adopten medidas para frenar el botellón y para que los vecinos podamos descansar». La próxima apertura les preocupa por los «excesos» que pueda conllevar.
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No obstante, desde la discoteca resaltaron que «no se va a permitir botellón en el parking» y que actualmente hay tres personas «controlando que la gente que sale fuera no moleste a los vecinos». También apuntaron que si el aparcamiento queda abierto por la zona trasera (la más próxima a las vías) tras su demolición y se habilita finalmente como aparcamiento público (un aspecto sobre el que el ayuntamiento ayer no se pronunció) el control será «más difícil».
Desde la Asociación de Patrimonio Industrial Valenciano (Apiva), su presidenta, Diana Sánchez, lamentó el final que ha tenido la antigua cervecera, «una de las primeras que ha tenido Valencia, muy ligada a su historia reciente, y de las pocas fábricas de estilo racionalista que existen en la ciudad». A su juicio, «el edificio, un gran contenedor que necesitaba poco mantenimiento, hubiera podido ser reutilizado para muchos fines aunque no tuviera protección patrimonial».
Fuente noticia e imágenes
Video "La antigua fábrica de cervezas Turia se convertirá en parking de una discoteca"