No es lo más habitual que una empresa guarde minuciosamente sus imágenes y documentos y llegue a configurar un fondo documental cuyo interés trasciende más allá de sus propios intereses y adquiere un relieve social. Es una excepción en un mar de desidia, pero ha ocurrido precisamente en una empresa que este año celebra su centenario, al que ha llegado en plena actividad y con buena salud después de una trayectoria que le ha situado como un referente de la industria guipuzcoana. Este milagro ha ocurrido en Niessen, uno de los buques insignia económicos de Errenteria, aunque actualmente sus instalaciones se ubican en terrenos de Oiartzun. Desde que el ingeniero alemán Guillermo Niessen fundara la empresa en 1914 las sucesivas generaciones han puesto empeño en coleccionar catálogos, fotografías, libros de apuntes y todo tipo de documentos propios de la actividad industrial. Solo así se explica que cuando en 2012 comenzaron a organizar la celebración del centenario se encontraron con un valioso fondo documental que no solo explicaba la historia de la propia empresa, sino de una parte del desarrollo industrial de Gipuzkoa. Así que por diversas circunstancias contactaron con Aranzadi y a través de esta vía ha sido posible el inventariado y la digitalización de los documentos. Además, un millar de imágenes, entre fotografías y documentos escritos, se ha puesto a disposición de los guipuzcoanos a través de la plataforma digital Gure Gipuzkoa de la Diputación Foral. Todo un legado al que ya se puede acceder fácil y gratuitamente.
Como explica Antxon López, jefe de marketing de Niessen, la donación tiene su origen en la «gran cantidad de documentación que poseemos y en la necesidad de dar un sentido a todo ese fondo no solo con motivo del centenario, sino para que después de esta efemérides pudiéramos contar con todos esos documentos debidamente ordenados». Para ello se ha contado con la ayuda de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, donde han entrado cerca de 6.000 documentos, 4.000 de ellos fotografías (la más antigua de 1914). «Además, encontramos catálogos de diferentes épocas, imágenes de las instalaciones, que dan idea de la evolución de la fábrica, de los trabajadores y sus puestos de trabajo e incluso de las actividades no estrictamente laborales que también organizaba la empresa», afirma López.
Entre todo este muestrario se han seleccionado mil documentos, los de mayor interés social, para trasladarlos a la web de la Diputación.
Un regalo para Aranzadi
Si la empresa tenía interés en la proyección social de su historia, para Aranzadi fue un auténtico descubrimiento. La entidad científica llevaba diez años buscando fondos fotográficos de todo Gipuzkoa en colaboración con la Diputación y cuando se le propuso la posibilidad de ordenar y digitalizar este fondo fue, como asegura el secretario general, Juantxo Agirre, «un regalo». Asegura que se encontraron ante un hecho excepcional. «Lo es que una empresa activa y dinámica que ha cumplido cien años posea un fondo documental de tal envergadura». Aranzadi planteó que una parte significativa de estas imágenes tenían que volcarse en Gure Gipuzkoa «porque es un legado que ayuda a comprender la evolución histórica de la realidad guipuzcoana, social y tecnológicamente, además de otros aspectos, como el papel de la mujer o los espacios de trabajo». Agirre señala que Aranzadi digitaliza entre 2.000 y 3.000 imágenes al año.
Hasta ahora la mayor parte de las que datan de principios del siglo XX correspondían a familias muy conocidas, generalmente de aristócratas, que eran los que poseían el dinero necesario para adquirir una máquina de fotos. «Pero nos faltaba esa dimensión de la historia industrial de Gipuzkoa y Niessen es la única que nos ha aportado una documentación gráfica y visual completa», asegura Agirre. Ha sido, reconoce, «una oportunidad de las pocas que nos salen» porque no existen demasiadas referencias gráficas de los 150 años de historia industrial de este territorio. «Lamentablemente nos hemos encontrado con que muchos fondos documentales han ido directamente a la basura cuando la empresa ha desaparecido», lamenta Agirre. En el polo opuesto, el fondo de Niessen no solo ha sido una inquietud de la empresa, sino que lo han enriquecido los propios trabajadores. «Cuando nos pusimos en marcha para la celebración del centenario y hablamos de la necesidad de organizar el fondo documental, tanto empleados y exempleados de la empresa se han implicado y nos han traído sus imágenes y sus documentos», relata López.
También Garazi Lopez de Etxezarreta, directora de Cultura de la Diputación Foral, considera «excepcional» que haya sido posible contar con un archivo industrial «debidamente guardado, digitalizado y puesto en valor, que además permite su acceso gratuito a los guipuzcoanos». En su opinión, existe un problema con el patrimonio industrial y por eso elogia que Niessen «haya tenido la sensibilidad y el deseo de poner ganas, ilusión y dinero en este trabajo».
Lo que llama la atención
Entre los documentos digitalizados se han intentado seleccionar para la plataforma digital aquellos que pudieran aportar una visión más histórica, como destaca Antxon López. «Por eso gran parte de las fotografías son en blanco y negro, pero destacaría especialmente las imágenes de los actos fuera de la actividad laboral en los que participaban los empleados». A Juantxo Agirre la llama la atención el elevado número de mujeres que han trabajado desde el principio en Niessen. «Elaboraban en grandes espacios piezas muy artesanales y muy delicadas», añade. También subraya el interés de los catálogos: «Lo que produce esta empresa son productos que están en nuestros hogares, un interruptor, un enchufe, que han formado parte de nuestras vidas como algo muy cercano, y en este caso, al haberlo conservado perfectamente, adquiere un gran valor documental. Pensemos, por ejemplo, en un cineasta que desea una ambientación de los años treinta o cincuenta. Además, son unos catálogos maravillosos porque son dibujos que parecen fotos», relata Agirre.
La directora foral de Cultura abunda también en el papel de la mujer en la empresa errenteriarra. «Es emocionante ver las fotos y comprobar la cantidad de mujeres que trabajaban allí, y es un ejemplo que subraya la importante participación de la mujer en la industria».
Niessen ha organizado diversas actividades a lo largo de este año para celebrar su centenario. Entre ellas, una exposición durante la semana de fiestas de Errenteria, en Torrekua, sobre la evolución de la empresa. La muestra se repetirá en la misma población en diciembre, pero hasta entonces se encuentra recorriendo diversos puntos de la península donde posee fábricas la empresa (desde finales de los setenta forma parte de la multinacional ABB). Por ejemplo, ya ha pasado por las factorías de Madrid y Córdoba, y la próxima semana estará en Barcelona.
El Museo San Telmo acogió en mayo la muestra 'Niessen 100 años después', integrada por fotografías, textos y una selección de piezas. Con tal motivo, la empresa donó al museo una colección de documentos históricos. En este acto se estableció un convenio para desarrollar a lo largo de este año un programa de visitas guiadas gratuitas, financiadas por Niessen y dirigidas a los centros de Formación Profesional. San Telmo acogerá a finales de octubre un acto conmemorativo.
*La noticia cuenta con un video